Las ‘amistades peligrosas’ de Kevin Spacey
Son muchas las voces que están comenzando a relacionar el caso de Kevin Spacey con el del cineasta Bryan Singer, también acusado de abusos sexuales hace solo dos años. La amistad entre ellos comenzó a fraguarse cuando trabajaron juntos en la película ‘Sospechosos habituales’ (1995) que catapultó a Spacey a su primer Oscar para posteriormente continuar su amistad fuera de los focos y de las cámaras de los estudios hollywoodienses.
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Sin embargo, el escándalo que Anthony Raff ha destapado sobre Spacey ha servido para que numerosos medios norteamericanos recuerden el caso de Michael Egan, el joven que con 31 años llevó a los tribunales a su amigo Singer, director de sagas como ‘X-Men’. «Hollywood tiene un problema con la explotación sexual de los niños», afirmó Egan en 2014 para después relatar una terrible historia sucedida en 1999 con el cineasta «y sus amigos».
«Bajo la amenaza de una pistola, me violó repetidas veces»
Michael Egan recuerda como acudió a fiestas que tenían lugar en una mansión de Encino llamada M&C Estate, junto a una piscina en la que la única condición era «no llevar bañador». Allí, según su testimonio, Bryan Singer le obligó «a esnifar cocaína y a beber alcohol». Después, «bajo la amenaza de una pistola, me violó repetidas veces. ‘Nosotros controlamos Hollywood -le dijeron, según ha denunciado-. Si no mantienes contentos a los miembros de este grupo, te eliminaremos’», expresó en su denuncia.
Egan llevó estos hechos a juicio por primera vez en el año 2.000 tutelado por su madre, Bonnie Mound, pero ni en aquella ocasión ni en la posterior de 2014, pudo demostrar su historia. Sin embargo, el actual caso de Kevin Spacey y su supuesto abuso sexual al actor de ‘Star Trek: Discovery’ así como los numerosos casos destapados por el ‘escándalo Weinstein’ han reavivado las llamas del Hollywood más dramático. Hoy todo el mundo está hablando de estas y de otras tantas historias que, según varios documentales como ‘An open secret’ (un secreto abierto) de Amy Berg, se quieren silenciar por el bien de la propia industria.